Plaza del trigo ourense
Marcos Witt (Videoclip Oficial) ft. Josué Del Cid
La historia del termalismo en Ourense no es nueva ni una moda pasajera, sino que se remonta a miles de años atrás. Fueron los romanos, buenos conocedores de los beneficios de las aguas terapéuticas, quienes habilitaron espacios arquitectónicos públicos para aprovecharlas en pro de la salud. Por eso, As Burgas, las primeras termas oficiales, son visita obligada en la ciudad.
Un lugar imprescindible para conocer la historia de As Burgas y su vinculación con el nacimiento de Ourense es el Centro de Interpretación del Conjunto Arqueológico y Termal. Ésta puede ser su primera visita. Allí conocerá la importancia de As Burgas como lugar emblemático desde el pasado hasta nuestros días. Precisamente en la ubicación de estos manantiales es donde se cree que pudo fundarse la ciudad de Ourense en época romana, Aquis Auriensis, es decir, aguas doradas. Sin embargo, estudios más recientes indican que también existen otros monumentos de la misma época (segunda mitad del siglo I d.C.).
Esto no significa que las termas no se utilizaran hasta los romanos, pues se sabe que los habitantes de los castros prerromanos ya las utilizaban con fines prácticos e incluso recreativos. Sin embargo, fue en época romana cuando se le dio un carácter arquitectónico. Los primeros restos hallados en las excavaciones arqueológicas de As Burgas son un santuario-piscina del siglo I d.C. y seis valiosas piedras votivas que mencionan a Revve Anabaraego, una divinidad que vivía en los manantiales. Junto a ese santuario hay una "balnea", una típica casa de baños donde se reunían para discutir sus asuntos cotidianos.
Carter y Carter - Stand Tall
Su forma irregular se debe a que es más un cruce de caminos que una plaza. Sus soportales recuerdan cuál fue su función durante décadas: un antiguo mercado de cerámica, platería y cereales, del que toma su nombre. Está dominada por la fachada sur de la Catedral, que ofrece magníficas vistas, y centrada por la Fuente Nueva. Rodeado de pórticos y casas burguesas, se prolonga por la plaza de las Damas, antigua orangerie de la Catedral.
La fachada sur de la Catedral destaca por el aspecto defensivo que le confieren las torres y almenas, evocando su dominio de la ciudad, y la dualidad de funciones del obispo, jefe religioso pero también civil. La Torre del Reloj, del siglo XVI, se añadió a la torre original, y aún se aprecian las diferencias entre las dos canterías. No es el único mecanismo para medir el tiempo que se encuentra aquí; en una de las columnas también podemos ver un reloj de sol (pero fíjese que la hora solar está adelantada dos horas).
A la izquierda, la plaza se prolonga en un pequeño patio conocido como Plaza de las Damas, que en la documentación medieval aparece recogido como "orangerie". Algunos autores creen que podría tratarse del espacio destinado al claustro inacabado de la Catedral. Aquí se encuentra la sede de la Confederación de Empresarios de Ourense, que ocupa el edificio renacentista de la antigua casa de la familia Gayoso, como demuestra el escudo de su fachada.
Danza folclórica tradicional polaca: Krakowiak - baile nacional
La construcción, en 1860, de la carretera nacional Villacastín-Vigo y de las nuevas líneas de ferrocarril provoca un periodo de crecimiento de la ciudad y del casco urbano, construyéndose un nuevo puente y nuevos barrios a su alrededor. En las primeras décadas del siglo XX, su casco histórico es testigo de un gran movimiento cultural y político liderado por Xeración Nós, destacando las figuras de Otero Pedrayo y Vicente Risco.En la actualidad, Ourense sigue manteniendo su importancia como centro industrial y comercial del interior de Galicia.
Comenzamos nuestra ruta en el Parque de San Lázaro, centro del Ourense actual en torno al cual se desarrolla toda la actividad comercial de la ciudad. Antiguamente estaba separado del centro de la ciudad y en él existía un pequeño hospital lazareto, además de ser sede de concurridas ferias. En el centro, podemos ver la fuente barroca del siglo XVI del monasterio de Oseira y varias esculturas con personajes típicos de la ciudad.
En un lateral de la plaza se encuentra la Iglesia de los Franciscanos, que fue construida en el siglo XIV en lo alto de la ciudad y posteriormente trasladada a este lugar en 1929. En la fachada, el rosetón del cuerpo superior y el inferior destacan dos contrafuertes que delimitan una triple arquivolta. El claustro, de estilo ojival, tiene 63 arcos apuntados sobre columnas gemelas, cuyos capiteles románicos presentan las formas más variadas
Bob Dylan - Every Grain of Sand (Ensayo) (Audio oficial)
Están por toda la ciudad y muchas son gratuitas. Como las termas de A Chavasqueira, al borde del río. Las aguas brotan a 65ºC en pleno centro de la ciudad, en la fuente termal de As Burgas, que junto al Santo Cristo y el Puente Romano conforman los símbolos de la ciudad.
Pero además, Ourense cuenta con una original Plaza Mayor... en cuesta, y un casco histórico rico en iglesias y capillas. El Pórtico del Paraíso de la Catedral aún conserva su policromía original.
Y en las capillas de San Cosme y San Damián, una curiosidad desconocida para los visitantes: aquí se expone durante todo el año el belén más asombroso. Y si busca animación, no se preocupe, porque si hay algo con lo que disfrutan los ourensanos es saliendo a la calle.
La Catedral... Llegamos a la Catedral, de la transición entre el románico y el gótico, con aspecto de fortaleza. Merece la pena hacer una visita detallada, especialmente de la Capilla Mayor, la capilla del Santo Cristo, el Cimborrio, Pórtico do Paraíso, claramente influenciado por la portada de la catedral de Santiago de Mestre Mateo, y el Claustro (conocido como la Claustra Nova), que contiene el museo catedralicio. La visita a la catedral, con sus juegos de luz y oscuridad, sus numerosas capillas y sus estilos siempre cambiantes, nos envuelve en una atmósfera verdaderamente mágica.